El vigente campeón del mundo de MotoGP™ habla en exclusiva con motogp.com tras terminar la temporada 2016, el año en el que ha conseguido su tercer título en la categoría reina: «Está claro que es el título más especial por la presión, porque mucha gente me analizaba y miraba lo que hacía. Y porque es la temporada en la que sentía que tenía peor moto ya que la moto no estaba lista para algunos circuitos. Y entonces tenía que pensar en solo terminar en la carrera. Honestamente, a veces era difícil de aceptar que algunos pilotos me adelantasen y terminasen por delante de mí. Pero empecé a entender que era positivo para el campeonato. Ha sido una lucha conmigo mismo toda la temporada»
Pero no todo comenzaba tan bien para el piloto de Honda, que se encontraba con problemas al inicio de temporada: «En invierno pasado las cosas fueron complicadas, mientras entrenaba pensaba que mi único objetivo era ganar. Así que la pretemporada fue fura porque yo llegaba muy motivado pero la moto no iba bien. Estábamos muy lejos del resto y en ese momento, sobretodo en el test de Malasia, me dije “ok, es imposible”. Pero mi mentalidad es de intentarlo siempre y tirar al máximo. Me acuerdo que en Qatar hicimos un cambio importante de última hora para equilibrar la moto y encontramos un compromiso en ese circuito que al final fue el mejor para toda la temporada».
Tras ver como Jorge Lorenzo se imponía en Qatar el 93 recalca la importancia de las dos siguientes carreras del campeonato: «Uno de los momentos claves de la temporada fue en Argentina y Austin porque empezar la temporada con un podio en Qatar y luego dos victorias es algo increíble. Mi peor momento quizás fue tras el GP de Francia, lo veía muy complicado de cara Mugello y Montmeló por eso fue vital terminar segundo y segundo y mostrar un buen nivel. Y por último destacar la importancia de las carreras en mojado, que en 2016 hemos tenido muchas. Es muy fácil cometer un fallo en la lluvia pero fuimos capaces de terminar todas las carreras entre los cinco primeros».
En el paddock apuntan a que la clave del título de Márquez este año ha sido su cambio de mentalidad: «Soy un piloto y también una persona que cualquier cosa la hace con pasión y que lo da todo. Antes para mí cada fin de semana era como una final. Me refiero a que encaraba las carreras con la necesidad de ganar y me olvidaba del campeonato. Pero ahora he empezado a entender que cada fin de semana es una pequeña parte de un todo final, que es el campeonato».
Por segunda vez en su trayectoria Márquez se proclamaba campeón del mundo de MotoGP™ en Japón: «Era imposible, no pensaba que sería campeón en Motegi. Es un circuito donde sufro, un circuito en el que nunca había ganado y donde los dos pilotos de Yamaha son muy rápidos. Era algo que no me podía imaginar. Incluso antes de la carrera no tenía ninguna sensación especial y pensé “hoy es imposible, necesitamos hacer un fin de semana normal”. Pero sí, me sentí fuerte y es la primera vez que gano el campeonato tras conseguir la victoria en la carrera».
«Ahora ya contamos los títulos mundiales con los dedos de una mano, ¡choca esos cinco!. ¿Por qué no conseguir otra manita?»Marc Márquez se ha convertido en el piloto más joven en conseguir cinco títulos mundiales, algo que no impresiona al piloto español: «Está claro que la gente dice “tienes 23 años y 5 títulos” y yo pienso “Sí, pero podría tener incluso más”. Y es que el año pasado no conseguí el campeonato por culpa de algunos errores. Ahora vamos a luchar por el sexto título y si lo conseguimos iremos a por el siguiente. Pero no quiero pensar en números o récords porque al final significa ponerse más presión. Tienes que disfrutar, si disfrutas estás centrado en el presente y es todo mucho más fácil. Pero está claro, ahora ya contamos los títulos mundiales con los dedos de una mano, ¡choca esos cinco!. ¿Por qué no conseguir otra manita? Pero no quiero decir que ese es mi objetivo. Ya veremos, tenemos tiempo y eso es lo más importante».