Cuatro Ducati oficiales rodarán en el Autódromo de Mugello. Al igual que el año pasado, la marca de Borgo Panigale verá como Michele Pirro se une a los tres pilotos que cuentan con una Desmosedici GP18 esta temporada (Lorenzo, Dovizioso y Petrucci). Ducati ha ganado dos veces en Mugello: además de la gran victoria del año pasado por parte de Andrea Dovizioso, Casey Stoner logró el triunfo en 2009.
El piloto de Forlí lamentaba no haber podido puntuar en las dos últimas carreras: “Es una lástima que hayamos perdido tantos puntos en las últimas dos carreras, pero no vale la pena pensar mucho en esto porque el Mundial todavía es muy largo”. Sim embargo, es optimista tras el triunfo de 2017: “El año pasado Petrucci y yo marcamos la diferencia para estar delante y estoy muy confiado porque este año hemos demostrado ser veloces en casi todas las pistas”.
Jorge Lorenzo se siente cerca del cajón: “Nos falta poco para luchar por el podio y necesitamos un paso adelante para ser competitivos: en Mugello lo podemos conseguir. Es un lugar especial y, tras el test de la semana pasada en Barcelona, podremos mejorar alguna cosa de la ergonomía de la moto”.
El piloto probador de la fábrica, Michele Pirro, volverá a competir en la Toscana y, dado que su peor resultado ha sido un 11.º, puede ser una baza importante: “ha llegado para mi la hora de salir a pista en MotoGP™. Será una carrera muy importante para nosotros desde todos los puntos de vista. Estoy realmente contento y no veo la hora de salir a pista. Es siempre muy emocionante correr delante del público de casa con los seguidores de Ducati”.