El histórico podio en Termas de Río Hondo le ha valido a Valentino Rossi (Monster Energy Yamaha) para cargar pilas y recobrar toda la confianza en su pilotaje antes de que la nueva temporada desembarque en Europa. Antes, sin embargo, el italiano afrontará un duro examen en el Circuito de Las Américas.
"Fue una gran emoción volver a subir al podio en Argentina, después de una espera tan larga para mí, para el equipo y también para los aficionados. Pero ahora tenemos que centrarnos en el próximo Gran Premio", comentó Valentino, pasando página a su meritoria segunda posición en Termas.
'Il Dottore', que las ha visto de todos los colores en la categoría reina, es plenamente consciente de la exigencia del trazado que acoge el GP Red Bull de Las Américas, la tercera cita del Campeonato del Mundo de 2019.
"Sabemos que Austin es una pista complicada. Tal vez sea la pista más difícil y técnica de la temporada de MotoGP™, pero en los años anteriores no fue tan malo para mí", valoró Rossi, que puso en valor que en las últimas campañas ha tenido buenas sensaciones: "En los últimos años me he sentido bien, y aunque el año pasado no subí al podio, sí lo hice en 2017".
En aquella ocasión, el '46' fue segundo tras Marc Márquez y por delante del otro piloto de Repsol Honda, Dani Pedrosa. El año pasado no consiguió igualar dicho registro, pero, al menos, logró quedarse a las puertas del podio, al finalizar en la cuarta posición, tras el propio Márquez, su compañero Maverick Viñales y Andrea Iannone.
La cita de 2017 está grabada a fuego en la retina de un Rossi que no descarta ningún escenario siempre que mantenga la fórmula aplicada en aquella edición: "Tenemos que hacerlo como lo hicimos entonces: trabajar bien, pilotar bien, seguir la dirección correcta, y luego ya veremos".
Tras su histórico podio en Argentina, Valentino quiere prolongar su positiva dinámica en 'territorio Márquez'. Un buen resultado le daría todavía más alas en su sempiterno anhelo por lograr la décima corona mundial.