Las primeras sesiones de entrenamientos libres del Gran Premio Michelin® de Aragón no invitaban al optimismo en el seno de Ducati. Sus principales pilotos, tras asistir al recital de Marc Márquez (Repsol Honda Team) en la FP1, no parecían disponer del ritmo suficiente para codearse con los más rápidos de la parrilla, pero el domingo de carrera tendría deparada una sorpresa muy especial para sus intereses.
Jack Miller (Pramac Racing) había marcado el camino de la esperanza el sábado al ser 4º en la Q2, mientras Andrea Dovizioso (Ducati Team) tuvo que conformarse con ser 10º. Su compañero, Danilo Petrucci, partiría 14º tras no pasar el corte de la Q1.
El papel de las Desmosedici GP, por tanto, estaba siendo totalmente secundario, a la sombra de unas Yamaha que se intuían como el principal quebradero de un Márquez especialmente sólido en el trazado aragonés. La historia, sin embargo, empezaría a cambiar a las 13:00 horas (hora local) del domingo.
'Dovi' centraría toda la atención de Ducati con una remontada para enmarcar que le permitiría ser 2º, seguido por un también meritorio Miller, que se ganó el podio en el último suspiro al batir a Maverick Viñales (Monster Energy Yamaha) en la última vuelta. Un auténtico festín inesperado para Ducati, pese a que el propio Márquez ya había advertido el día anterior que no se fiaba de un piloto como 'Dovi'.
El piloto de Forlí, beneficiado en primera instancia por el toque entre Franco Morbidelli (Petronas Yamaha SRT) y Álex Rins (Team Suzuki Ecstar) en la curva 12, apretó para superar con relativa comodidad a Valentino Rossi (Monster Energy Yamaha MotoGP) y Aleix Espargaró (Aprilia Racing Team Gresini). A partir de ahí, se sintió capaz de todo.
Fabio Quartararo (Petronas Yamaha SRT), Miller y en, última instancia, Viñales fueron cayendo al paso fulgurante del doble subcampeón mundial de MotoGP™. "He gestionado mi carrera a la perfección", explicó el italiano, que puso en valor su constancia como clave para "terminar por delante de Viñales".
Otro de los pilares de su remontada fue, sin duda, el cambio del neumático trasero a última hora para apostar por el blando, ya que Yamaha optó por una combinación diferente con un neumático trasero duro que, a la postre, no resultó tan efectivo. "Las temperaturas eran muy diferentes a las del día anterior, lo que nos dio la oportunidad de tomar la decisión correcta", destacó 'Dovi'.
Tito Rabat (Reale Avintia Racing), que cerró la zona de los puntos al ser 15º, y los otros dos pilotos de Ducati en liza, 'Pecco' Bagnaia (Pramac Racing) y Karel Abraham (Reale Avintia Racing), 16º y 18º, respectivamente, también rodaron con la goma trasera blanda, siguiendo los pasos de los dos pilotos de Ducati que coparon el podio junto al líder.
En efecto, 'Dovi' y Miller sacaron partido del blando trasero, mientras que el propio Petrucci y los pilotos de Yamaha se vieron lastrados al apostar por el duro. "Es un resultado importante, porque en Silverstone tuvimos la oportunidad de luchar por la victoria y al final perdimos algunos puntos importantes. En Misano, tuvimos muchos problemas. Necesitábamos un resultado así", sentenció 'Dovi', que tratará de brillar dentro de dos semanas en Tailandia para retrasar el probable alirón de Márquez.