2022, un año crucial para algunos pilotos de fábrica

Repasamos la situación de algunas estrellas de la categoría reina que deberán dar un paso adelante en la próxima temporada 2022

Con excepciones puntuales como Marc Márquez (Repsol Honda Team), comprometido con HRC hasta 2024, Franco Morbidelli (Monster Energy Yamaha MotoGP), ascendido al Monster Energy Yamaha MotoGP por dos temporadas, o Brad Binder (Red Bull KTM Factory Racing), renovado hasta 2024, la mayoría de los pilotos -incluidos los que integran los equipos oficiales- llegarán al final de sus contratos en pocos meses. Mientras algunos de ellos no tienen motivos para preocuparse, como el nuevo campeón, Fabio Quartararo (Monster Energy Yamaha MotoGP), al que le lloverán las ofertas, otros podrían ver amenazado su asiento. En otras palabras, esta campaña de 2022 promete ser decisiva.

El caso de Alex Rins

De Alex Rins (Team Suzuki Ecstar) se espera mucho en un 2022 clave para su futuro. El catalán solo ha podido concluir la temporada 13, diez posiciones por detrás de su meritorio tercer puesto en 2020. De hecho, el '42' solo consiguió un podio, frente a los cuatro del año anterior. Sin duda, se vio penalizado por sus ceros, un total de seis para ser exactos, alguno de ellos cuando aspiraba a todo. El representante del Team Suzuki Ecstar dijo tras la última carrera que no habría tenido que forzar al límite si el paquete de su GSX-RR le hubiera permitido competir con Jorge Martín (Pramac Racing) y Francesco Bagnaia (Ducati Lenovo Team). A esto se suma su ausencia en Catalunya, debido a una caída ocurrida mientras rodaba en bici en el mismo Circuit, en la que se fracturó la muñeca. Demasiado infortunio para un piloto que tiene ritmo para codearse con los mejores, incluido su compañero, Joan Mir. Está obligado a pasar página en 2022.

El caso de Miguel Oliveira

Tampoco le fue mucho mejor en la general a Miguel Oliveira (Red Bull KTM Factory Racing), tras finalizar con el 14º puesto. Por mucho que el piloto portugués lograra acaparar titulares antes del parón estival, con tres podios consecutivos, incluida una victoria en Catalunya, y un Top 5 en Assen, su segunda mitad de temporada fue para olvidar, acumulando un discreto botín global de 9 puntos. Un llamativo contraste que también podría explicarse por el 'highside' que sufrió en el Red Bull Ring y del que tardó en recuperarse. Con Brad Binder yendo claramente a más, sumando un nuevo triunfo en Austria y acabando 6º en la general, Oliveira deberá ser más regular tras reponerse físicamente durante el descanso invernal.

El caso de Pol Espargaró

Los ojos también estarán puestos en Pol Espargaró (Repsol Honda Team), 12º en la clasificación general este año. El piloto catalán no tuvo el comienzo esperado con Honda, debido a las exigencias de la RC213V. Por supuesto, se notó una paulatina mejora con el paso de los meses, que cristalizó con el segundo puesto en Misano, su mejor resultado histórico en MotoGP™. Sin embargo, si se compara con su compañero de equipo, Marc Márquez, ausente en cuatro rondas, las diferencias son notorias, ya que el balance final de puntos favorece al octocampeón por 42 puntos. En todo caso, las mejores sensaciones en el sprint final de la temporada y su 'feeling' en el Test de Jerez suponen un rayo de esperanza de cara a un 2022 en el que Honda confía en voltear la dinámica actual.

El caso de Maverick Viñales

Después de un convulso 2021, Maverick Viñales (Aprilia Racing) espera recuperar la estabilidad con Aprilia, la fábrica a la que se unió a principios de septiembre tras su prematura separación de Yamaha y las dos rondas apartado de la competición. El '12' logró terminar dos veces en los puntos en cinco carreras, destacando su octavo puesto en el GP de la Emilia-Romaña. Una vez terminado el proceso de adaptación, Aprilia probablemente le pedirá más, consciente de su enorme potencial como ganador de carreras. El histórico podio de su compañero, Aleix Espargaró, en Silverstone marca el camino en Noale. A la espera de conocer el verdadero arsenal de la nueva RS-GP en pretemporada, ¿cuánto tardará Maverick en asomarse a los Top 5?

El caso de Jack Miller

Jack Miller (Ducati Lenovo Team), autor de dos victorias en 2021 -Jerez y Le Mans-, ha tenido más luces que sombras en un curso en el que a menudo ha estado más atrás que su compañero, Francesco Bagnaia, especialmente los domingos. El australiano solo ha terminado cinco veces por delante de su compañero de equipo y tiene la mitad de podios. Clasificado 4º en el campeonato, sus actuaciones no son ni mucho menos discretas, pero no hay que perder de vista el empuje de los jóvenes pilotos de Ducati recién llegados a la categoría como Jorge Martín (Pramac Racing) o Enea Bastianini (Gresini Racing MotoGP), que cosecharon diversos podios en su pugna por el Rookie del Año, con el español llegando incluso a ganar en Spielberg. La competencia es muy alta en Borgo Panigale. Por tanto, Miller no podrá relajarse y deberá destacar desde el inicio del curso en Qatar, o de lo contrario se arriesga a que le 'roben' el sillín.

El caso de Franco Morbidelli

También en Yamaha habrá que estar atentos a la situación y el rendimiento ofrecido por Morbidelli. Pese a haber firmado dos años con el equipo de fábrica, muchos ojos estarán puestos en las actuaciones del italiano tras un 2021 muy complicado, marcado por la lesión de rodilla que arrastraba, por la que tuvo que pasar por el quirófano, perdiéndose un total de cinco carreras a mitad de temporada. Tras volver a puntuar en Misano y Valencia, 'Franky' se encontró más cómodo con la renovada M1 en el Test de Jerez que su compañero Quartararo, con el que ya había formado equipo en el Petronas Yamaha SRT. Con el merecido privilegio de disponer de un paquete técnico de primer nivel y tras abandonar el abrigo de su mano derecha, Ramon Forcada, necesita encontrar continuidad y recuperarse por completo de la rodilla operada para volver a mostrar ese nivel que le permitió finalizar subcampeón en 2020.

Todos ellos deberán apretar los dientes a partir del Test de Sepang, del 5 al 6 de febrero.