El piloto español se subía a una moto de MotoGP™ por primera vez el pasado mes de noviembre durante el test oficial de Valencia, en el que sufría una aparatosa caída: «El tramo final de año ha sido un poco duro. He estado todo un mes con el corsé, intentando hacer reposo porque al final la espalda es una cosa seria. La caída fue muy rara porque me caí, y después de dos vueltas, en el mismo punto exacto, se cayó Iannone, mi compañero de equipo. Hemos estado repasando la telemetría, intentando sacar alguna valoración, pero no hemos encontrado nada. Pisé la misma trayectoria, se bloqueó la rueda delantera y perdí la dirección».
Sobre las diferencias que existen entre la categoría intermedia y la categoría reina el español lo tiene claro: «En MotoGP influye mucho más el físico que en la Moto2. Ya lo vimos en Valencia. El primer día acabé un poquito cansado y hemos cambiado cosas del entreno para coger un poco más de fuerza e ir un poco más tranquilo con la MotoGP».
2017 se presenta como el año de su debut en MotoGP™ por lo que el piloto de Suzuki tiene en mente un objetivo: «Con lo que he podido ver en Valencia, el objetivo será ser Rookie del Año, intentar batir a los pilotos con quién he estado en Moto2: Zarco, Folger y Lowes. Es el objetivo que me marco ahora. Quizá cuando tenga más vueltas con la moto y esté más a gusto, el objetivo será otro: el Top 15, Top 10… no tengo ni idea».
Rins llega a un equipo con el que Maverick Viñales consiguió un triunfo y varios podios antes de fichar por el equipo de fábrica Yamaha. «Obviamente la presión será grande porque soy el relevo de Maverick Viñales, que estuvo en Suzuki. Y con Maverick siempre hemos estado batallando en categorías pequeñas. En Moto2, él se fue de Pons y yo entré en este equipo. Siempre ha habido un poco de comparación. Pero ojalá me comparen con él en MotoGP porque la verdad es que ha tenido dos años increíbles e intentaré, si no igualarlo, hacerlo mejor que él».