Marc Márquez, Steve Smith, Leo Messi, Lewis Hamilton y Roger Federer no son intocables. Aunque, como demostró 'Dovi' en la increíble carrera del domingo en Austria, hay que generar algo muy especial para detener a una bestia.
Márquez llegó a Red Bull Ring en un estado de forma espectacular. Ducati había ganado en los tres enfrentamientos anteriores en el majestuoso circuito austríaco, el único campo de batalla del calendario en el que el piloto de Repsol Honda no ha llegado a subirse en el escalón más alto del podio. Obviamente, era algo que Marc quería revertir, con el objetivo de lograr su pleno particular.
La clasificación tuvo un aire familiar. Márquez, desde la 'pole', perseguiría su séptima victoria de la temporada para aumentar esa ventaja aparentemente inalcanzable al frente del Campeonato. Fue su 59ª 'pole position' en la categoría reina, lo que le convierte en el piloto más exitoso de todos los tiempos, superando al pentacampeón mundial de 500cc Mick Doohan.
Marc hizo una gran salida en la carrera, pero desde la primera curva resultó evidente que la historia iba a ser distinta, ya que 'Dovi' apretó al máximo con la Desmosedici GP alrededor de las colinas. No iba a dejar que Márquez se escapara y era bastante obvio que todo se iba a resolver en el último par de vueltas y, probablemente, en la última curva en la que 'Dovi' se había impuesto a Marc hace un par de años en un final memorable. Esta vez fue aún mejor, con 'Dovi' viniendo desde atrás para hacer un 'Márquez' al propio Marc y firmar una victoria crucial tanto para él, como para Ducati y el Campeonato.
MotoGP™ nunca podría ser acusada de ser aburrida, pero necesitaba una carrera como esta para avivar la llama. También dio ánimos a los defensas que intentan impedir que Messi marque más goles, a los pilotos de Fórmula Uno que luchan por impedir que Hamilton gane otro título mundial y a los tenistas que intentan devolver el saque de Federer.
La mayor incógnita es si 'Dovi' puede repetir su jugada de nuevo en el rapidísimo circuito reasfaltado de Silverstone. Mientras tanto, me pregunto si el italiano puede jugar a cricket. Inglaterra está inmersa en la fiebre del The Ashes en este momento. El segundo partido de la encarnizada batalla entre los viejos enemigos de Inglaterra y Australia comienza el miércoles en el estadio londinense de Lord's. Australia ganó el primer partido con su bateador Steve Smith destruyendo a Inglaterra sin piedad. Los titulares de los medios de comunicación que salieron a la luz durante los días siguientes reflejaban que era imposible plantarle cara. ¿Qué harás el miércoles, 'Dovi'? ¿Hay alguna posibilidad de que te conviertas en un héroe inglés durante esta semana?