Aleix, del premio de la Q2 al castigo del motor

El mayor de los Espargaró despidió un GP británico agridulce al romper el motor a falta de 2 vueltas, cuando peleaba por el Top 10

Aleix Espargaró (Aprilia Racing Team Gresini) tuvo un desafortunado cierre del Gran Premio GoPro de Gran Bretaña. El de Granollers, que peleaba junto a su compañero, Andrea Iannone, por el Top 10 de la carrera, vio frenadas sus aspiraciones al sufrir una rotura del motor de su RS-GP.

El golpe llegó en el momento más inesperado, a falta de menos de 2 vueltas para el final, con su hermano Pol (Red Bull KTM Factory Racing) rodando ligeramente por delante. Fue, sin duda, un varapalo después de un fin de semana que también permitió sacar conclusiones positivas, tras acceder directamente a la Q2.

Después de ser 12º en las dos primeras sesiones de entrenamientos libres del viernes, Aleix dio un paso adelante el sábado para finalizar 10º en la FP3, consiguiendo, así, su pasaporte directo a la Q2, donde solo pudo finalizar 12º.

El mayor de los Espargaró, por tanto, partió en carrera desde la cuarta fila de la parrilla, viéndose salpicado por el 'crash' de Fabio Quartararo (Petronas Yamaha SRT) y Andrea Dovizioso (Ducati Team) que marcó el inicio de la prueba en el circuito británico.

"Mi salida fue muy buena, pero luego perdí un par de posiciones tras el accidente de 'Dovi' y Quartararo. Me las arreglé para recuperarme rápidamente y mi ritmo no era malo", repasó Aleix sobre el inicio de una carrera que dio un vuelco a los pocos segundos.

"Luché con Petrucci y mi hermano durante un tiempo, pero no fue fácil estar al frente. Sentí que tenía un buen ritmo, tal vez un poco mejor que el de ellos", continuó el de Granollers, antes de revelar el episodio que marcó su abrupto final en los últimos compases de la carrera.

En efecto, el motor, que ya había dado problemas el viernes durante la primera jornada, volvió a fallar a falta de solo 2 vueltas para ver la bandera a cuadros en Silverstone. Un auténtico mazazo al que hay que unir la preocupación por romper dos motores en el mismo fin de semana. Una circunstancia que afecta de lleno a la planificación de los próximos Grandes Premios.

"Desafortunadamente, a menos de dos vueltas de la llegada, la moto se detuvo. Es una pena después de todo lo que hemos hecho", lamentó Aleix, que se quedó sin premio después de un fin de semana en el que apuntaba claramente al Top 10. Ahora no le toca más remedio que activar el 'modo Misano' para remontar el vuelo.

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