Era uno de los momentos más esperados del año y ya está aquí. Por primera vez en mucho tiempo, la 'season finale' del Campeonato del Mundo de MotoGP™ no tendrá la clásica postal de Valencia. En su lugar, la parrilla de pilotos afrontará un desafío inédito al estrenarse en un GP en el Autódromo Internacional del Algarve con motivo del Gran Premio MEO de Portugal que bajará el telón de la temporada 2020.
De la esperada visita a la montaña rusa de Portimao hablaron este jueves los pilotos presentes en la rueda de prensa previa al evento, liderados todos ellos por el flamante Campeón del Mundo de 2020, Joan Mir (Team Suzuki Ecstar). El balear estuvo acompañado por el ganador de la última carrera, Franco Morbidelli (Petronas Yamaha SRT) y los dos hombres que también subieron al podio: Jack Miller (Pramac Racing) y Pol Espargaró (Red Bull KTM Factory Racing). Además, también participaron el piloto local Miguel Oliveira (Red Bull KTM Tech3) y dos pilotos que abandonarán el circo de la competición de cara al próximo año: Andrea Dovizioso (Ducati Team) y Cal Crutchlow (LCR Honda Castrol).
Mir tomó la palabra haciendo los honores propios del campeón y detalló las celebraciones vividas el pasado domingo, aunque acreditó su profesionalidad al remarcar la importancia de la última carrera ante el ambicioso reto de culminar la Triple Corona para Suzuki. "Sería una temporada de fábula tanto si fuésemos capaces de conseguirla como no, pero sería fantástico lograrlo", aseguró Mir, que se confesó "totalmente concentrado" y "motivado" en dicho reto.
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ASÍ ESTÁ LA GENERAL DEL CAMPEONATO
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LA RUEDA DE PRENSA, AL COMPLETO
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MIR TIENDE LA MANO A JUGAR EN EQUIPO
Después de haber recibido el apoyo de su compañero, Alex Rins, en anteriores ruedas de prensa, el nuevo campeón también tendió su mano al catalán de cara a su lucha por el subcampeonato. "No tuvimos esa conversación, pero si me lo piden, no voy a tener problemas en ayudar a Alex (Rins) a conseguir el subcampeonato", explicó, sin perder de vista el objetivo paralelo de la Triple Corona. Joan, además, también admitió que aún no ha tomado una decisión sobre su dorsal para el próximo año.
Rins, de hecho, es uno de los grandes favoritos para finalizar 2º en la general, con permiso, claro está, de un Morbidelli que llega muy fuerte tras su última victoria en Valencia. El italo-brasileño aseguró estar "muy emocionado" y tener "mucha curiosidad" por "ver cómo va a funcionar este circuito con una moto de MotoGP™". 'Morbido' recordó sus anteriores experiencias en Portimao en 2013 y hace unos meses en el Test previo a Le Mans y destacó que es una pista que genera "mucha adrenalina". En ella espera poner el broche de oro a una "temporada maravillosa".
Menos opciones de pugnar por el subcampeonato conservan Dovizioso y Pol Espargaró. El italiano, 6º en la general al ir a menos tras el ecuador de la temporada, quiere "terminar bien" su etapa en Ducati, a poder ser "con un buen resultado" que ayuda en la lucha por el Título de Constructores. El de Forlí también destacó la importancia del desconocimiento de la pista, un factor que añade emoción a su cita de despedida con la fábrica de Bolonia. El italiano también tuvo tiempo para elogiar al ingeniero Alberto 'Piggia' Giribuola, parte clave de sus éxitos en los últimos años. A buen seguro que un gran resultado supondría una despedida muy especial. Sobre el futuro, el triple subcampeón mundial de la clase reina se mostró esperanzado respecto a tener oportunidades a considerar.
Tras sus últimos dos podios en Valencia, Pol Espargaró se encuentra a tan solo 3 puntos de 'Dovi' en la general. El de Granollers también arde en deseos por competir en "una pista especial, diferente", de la que también puso en valor las condiciones meteorológicas que invitan al optimismo. 'Polyccio' también puso encima de la mesa como un factor a tener en cuenta que KTM dispondrá de los consejos de Oliveira, conocer de su circuito de casa: "Su conocimiento va a ser importante para todos nosotros". Respecto a la clasificación actual, Pol sigue mirando hacia arriba con la ambición de "ser capaces de dar un buen mordisco al campeonato". Un objetivo que comparte con la emoción por despedirse de la fábrica de Mattighofen. "La mayor parte de lo que voy a echar de menos son las personas involucradas en el proyecto, el factor humano", confesó, antes de mostrar sus mejores deseos para el futuro de KTM.
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El citado Oliveira, como cabía esperar, aseguró sentirse "muy feliz y emocionado" después del paréntesis del Mundial en tierras portuguesas desde 2012: "Tener la oportunidad de disputar un GP aquí en casa, pese a ser un año extraño, es fantástico". El piloto de Tech3, que pasará al equipo de fábrica en 2021, aventuró que "los aficionados pueden esperar un gran espectáculo" al tratarse de "un trazado distinto a lo que vemos en cualquier circuito del mundo". El luso también tuvo palabras en clave de despedida para su equipo, aunque seguirá involucrado en la familia KTM y no perdió la oportunidad de elogiar el trabajo realizado por el menor de los Espargaró, que "deja el listón muy alto".
Fuera de la lucha por el subcampeonato, pese a su exhibición en la última cita en Valencia, se encuentra Miller. El australiano recordó con entusiasmo su experiencia previa en el último Test y aseguró que llega con buen 'feeling' respecto a su Desmosedici GP gracias a "la confianza de los resultados del último fin de semana" y el entendimiento de su paquete actual. El carismático 'Jackass', que también cambiará de equipo en 2021 al saltar al Ducati Team, también tuvo palabras de elogio para Crutchlow, aderezadas por su inconfundible sentido del humor, en la antesala de su adiós antes de pasar a integrar el equipo de pruebas de Yamaha.
En la que será su última carrera, el británico se confesó "satisfecho de llegar a un circuito tan bueno" que le reporta grandes recuerdos, ya que allí ganó el título de Supersport y cosechó buenos resultados en Superbikes. "Será muy divertido, vamos a ver una buena carrera", profetizó el británico, que también tuvo la oportunidad de hacer un rápido repaso a su carrera. Un exitoso viaje de una década con un balance claro y sincero: "He superado mis propias expectativas". Para expectación, eso sí, la que ha levantado la última cita del año en Portimao, tanto entre aficionados, como entre los propios pilotos. ¿Serán capaces de gestionar los retos de la montaña rusa portuguesa? ¡Empieza a descubrirlo este viernes con los primeros entrenamientos libres!