Viñales y Rossi: confirmación, reválida… ¿y triunfo?

Las horas pasan lentamente en el seno del equipo Monster Energy Yamaha. Las ganas por comenzar a rodar en la segunda mitad de la temporada son enormes, especialmente entre sus dos pilotos oficiales: Maverick Viñales y Valentino Rossi.

Ambos han sido la cara y la cruz del equipo en los últimos Grandes Premios, pero, tras el parón estival, el objetivo es que ambos vayan al alza, especialmente teniendo en cuenta que tras el GP checo se celebrará un importante test post-GP en el que se empezarán a sentar las bases del proyecto de 2020.

La cita en el Automotodrom de Brno, la décima prueba del campeonato, también cuenta con un importante plus añadido a nivel comercial para el equipo oficial de Yamaha, ya que comparte patrocinador con el Gran Premio Monster Energy de la República Checa.

Viñales llega al GP checo como 5º clasificado, después de enlazar una gran victoria en Assen y la segunda posición en Sachsenring, que le permitieron desbancar al propio Rossi en la clasificación general. El italiano es ahora 6º. Maverick ostenta 85 puntos, por los 80 de Valentino, y ambos miran hacia adelante con el objetivo de pelear por el Top 3 de la clasificación general. Los 185 puntos del líder, Marc Márquez (Repsol Honda Team), quedan, ahora mismo, muy lejos.

Viñales, que ha recargado pilas estas semanas, quiere volver a subirse al podio en un circuito en el que ya lo logró en 2013, al ser 2º en Moto3™, y en 2017 en la categoría reina, cuando finalizó 3º en su primera carrera en el trazado checo con Yamaha.

El palmarés de Rossi es, sin duda, envidiable. También en Brno. Allí consiguió su primera victoria en la categoría de 125cc en 1996. Sus registros están solo al alcance de las leyendas. El triunfo de 1996 tuvo continuidad con una victoria en 250cc en 1999, un triunfo en 500cc en 2001 y nuevas victorias en la categoría reina en 2003, 2005, 2008 y 2009. Desde entonces, volvió a subir al podio en 3 ocasiones más (2014, 2015 y 2016). Tras ser 4º los dos últimos años, Valentino quiere reverdecer viejos laureles.

Viñales afronta la segunda mitad del año "con un ánimo muy positivo": "Tras la victoria en Assen y el segundo puesto en Sachsenring nos fuimos de vacaciones muy contentos, con la convicción de que vamos por el buen camino y con la tranquilidad que nos da el trabajo bien hecho. Hemos podido descansar un poco durante las vacaciones de verano, pero también ha sido útil completar muchos entrenamientos para llegar a este GP sintiéndonos física y mentalmente fuertes".

El de Roses tampoco pierde de vista que ahora visita algunas pistas favorables para sus intereses: "Las dos próximas carreras se disputan en dos circuitos que me gustan mucho, pero en los que tendremos que trabajar duro para obtener resultados positivos. Creo que puedo mostrar todo mi potencial allí y confirmar que estamos trabajando en la dirección correcta. Brno es uno de mis circuitos favoritos, así que voy a dar el 100% para seguir mejorando paso a paso".              

Rossi, por su parte, también ha desconectado justo a tiempo para volver a la carga con máxima intensidad: "Durante las vacaciones era importante tomarse un tiempo libre tras la primera parte de la temporada y descansar un poco. Pero ahora no veo la hora de volver a la pista, a lomos de mi M1, y centrarme en esta segunda parte. Tendremos dos GP consecutivos en los que será necesario trabajar bien y obtener los mejores resultados posibles".

Valentino es consciente de que afronta una fase clave de la temporada para medir sus verdaderas aspiraciones de éxito, tanto en esta campaña como en la siguiente: "Será una segunda mitad importante de la temporada porque necesitamos mejorar, y también empezaremos a prepararnos para el 2020, empezando por el test del lunes". Por suerte, se trata de un circuito que siempre se le ha dado bien. "Brno es una pista que siempre me ha gustado. Quiero trabajar bien con mi equipo para que sea un buen fin de semana. Necesitamos un buen resultado, así que haremos todo lo posible", sentenció el '46'.