Red Bull KTM ha dado el primer gran paso hacia la próxima era de MotoGP al probar por primera vez su motor prototipo de 850cc en el dinamómetro de su sede en Mattighofen. La prueba ofreció las primeras lecturas de potencia de un motor diseñado para funcionar íntegramente con combustible no fósil, un requisito clave de los próximos objetivos de sostenibilidad del campeonato. La sesión marcó el inicio de una nueva fase de desarrollo mientras KTM prepara su máquina para las pruebas en pista de cara a la temporada 2027.
A partir de 2027, MotoGP dará la bienvenida a una nueva generación de motos orientada a hacer las carreras más seguras, sostenibles y competitivas. La cilindrada de los motores pasará de 1000cc a 850cc para reducir las velocidades máximas y mejorar la eficiencia, mientras que los elementos aerodinámicos se simplificarán para fomentar carreras más cerradas y con más adelantamientos.
Se prohibirán los dispositivos de regulación de altura de conducción y 'holeshot' para mejorar el control del piloto, y todas las motos utilizarán combustible 100% sostenible, reflejando los objetivos medioambientales del campeonato. Estos cambios buscan no solo reducir costes y aumentar la relevancia para la carretera, sino también hacer que las carreras de MotoGP dependan más que nunca de la habilidad del piloto y del espectáculo.
Pit Beirer, KTM Motorsports Director:
"Estoy muy contento de que hayamos podido poner en marcha el futuro de MotoGP ya en septiembre de 2025. Vamos según el calendario perfecto para tener la moto lista muy pronto. Hemos volcado todo lo aprendido durante los últimos años de participación en MotoGP en este motor y tengo plena confianza en que esta obra de arte se convertirá en un referente en las próximas temporadas a partir de 2027. Quiero agradecer a la fábrica y a todo el equipo detrás del proyecto este enorme esfuerzo".