El Campeonato del Mundo de MotoGP llega a Mugello, y para Michelin, la visita a la Toscana será uno de los eventos más difíciles de planificar del año. La combinación de cambios de dirección a gran velocidad, curvas contraperaltadas, y una recta donde se alcanzan regularmente los 350 km/h, sumado a su posterior deceleración, hacen que los neumáticos vuelvan a sufrir más de lo usual.
Michelin llevará a Mugello compuestos blandos, medios y duros tanto en sus gomas delanteras como las traseras. Todas las delanteras serán siméticras, mientras que los neumáticos traseros medios y duros se presentan asimétricos, con la parte derecha más dura para combatir las nueve curvas a derecha frente a las seis de izquierdas que presenta el trazado italiano.
"Después de toda la emoción del Gran Premio en casa de Michelin en Le Mans, ahora nos encontramos con este circuito tan complejo y exigente para los neumáticos, que se ven sometidos a una prueba muy severa con curvas encadenadas y fuertes frenadas, así como su larga recta" afirma Piero Taramasso, Director de Michelin en MotoGP™. "Al comienzo del año tuvimos que tener en cuenta todas estas características para elegir la mejor gama de neumáticos. Es una de las carreras más difíciles de planificar. Llevamos a cabo un test en Mugello justo antes de Le Mans para confirmar algunas cosas. También hemos logrado tiempos muy rápidos, no oficiales, por lo que sería bueno también repetirlos durante el fin de semana de carrera".