Puede que os sorprenda, pero disfruto mucho planificando e investigando para mi blog incluso antes del día de la carrera. Assen no fue una excepción, pero entonces todo se torció terriblemente hasta que apareció Francesco Bagnaia para salvar el día con una clase magistral de supremacía total de MotoGP™ en 'La Catedral'. Campeón del Mundo de nombre y de acción. No es de extrañar que el italiano lleve tatuada la silueta de Assen en su brazo derecho. Esta fue su sexta victoria en el TT neerlandés y su tercera consecutiva en MotoGP™ en el legendario escenario de los Países Bajos. El último piloto en hacerlo, antes de 'Pecco', estaba allí para aplaudir: Mick Doohan ganó cinco de manera consecutiva entre 1994 y 1998.
Todo parecía tan sencillo. Hace cincuenta años, el Che Guevara de los Grandes Premios debutaba en Assen. En 1974, Kenny Roberts llegó a Europa y la vida nunca volvió a ser la misma. Con su compatriota Joe Roberts ganando la carrera de Moto2™ en Mugello el mes pasado y segundo en el Campeonato del Mundo, era el momento perfecto para recordar el pasado y predecir el futuro. Ha llegado el momento del renacimiento de los pilotos americanos en el Campeonato del Mundo y, en última instancia, de volver a la cima que dominaron durante tanto tiempo. Con el apellido de Roberts, ¿cómo se podía fallar?
Kenny se hizo con la 'pole position' en aquel primer Gran Premio de 250cc, se cayó en carrera, pero remontó hasta acabar tercero. El resto es historia. Le apasionaban las carreras de Gran Premio. Lideró una revolución desde el frente, tanto dentro como fuera de la pista. Su "sliding style", perfeccionado en las pistas de tierra de su país, nunca se había visto en los circuitos europeos. Para disgusto de los habituales de los Grandes Premios y del Campeón del Mundo Barry Sheene en particular, Kenny ganó tres títulos mundiales consecutivos de 500cc para Yamaha. Y eso fue solo el principio. Se enfrentó a los organizadores y promotores que habían mostrado tan poco respeto por la seguridad y el bienestar de los pilotos. Junto con el periodista Barry Coleman, amenazaron, con el apoyo de todos los mejores pilotos, con formar unas World Series rivales en 1980. Nunca llegó a producirse, pero la amenaza supuso un aumento del quinientos por cien de los premios y un incremento masivo de la seguridad en todos los aspectos.
Kenny había tendido el puente a través del Atlántico para que los pilotos estadounidenses pudieran competir. Tanto talento llegó en dirección opuesta a los Padres Peregrinos. Les encantaban esos temibles cohetes de 500cc y dos tiempos. Los títulos mundiales fluyeron para Freddie Spencer, Eddie Lawson, Wayne Rainey, Kevin Schwantz y su propio hijo Kenny Junior. Fue la época dorada de Estados Unidos, pero poco a poco la fuente de talento empezó a agotarse. Nicky Hayden fue el último Campeón del Mundo americano en 2006. Ben Spies el último ganador de un Gran Premio en 2011. Durante un tiempo, increíblemente, no hubo pilotos estadounidenses en ninguna de las categorías de Gran Premio, pero entonces llegó Joe Roberts. Esa segunda victoria en Moto2™ le daba una posibilidad competitiva de ganar el título mundial y una oportunidad real de subir a la categoría de MotoGP™.
Todas mis ideas saltaron por los aires el viernes por la tarde. El desafortunado Roberts se cayó y se rompió la clavícula en los entrenamientos. El piloto del Only Fans American Racing Team fue declarado no apto, pero esperemos que esté de vuelta para Sachsenring.
Mientras paseaba a mi perra Candy, después de ver el implacable dominio de Bagnaia en el Tissot Sprint, tuve otra inspiración. Esa misma tarde, Italia se enfrentaba a Suiza en la fase eliminatoria del Campeonato de Europa de fútbol. Comparemos la defensa del título de campeones de Europa con la defensa de su título mundial por parte de Bagnaia y su equipo Ducati Lenovo. En Mugello cambiaron el tradicional rojo Ducati por el 'azzurro' para mostrar su apoyo a la selección nacional.
Dos horas más tarde, todo volvía a empezar. Suiza venció cómodamente a los campeones, que volvían a casa tras una derrota por dos a cero.
'Pecco', tu brillantez salvó el día. Tengo algunas ideas para Sachsenring, pero creo que es mejor que me las guarde para mí, ya que no puedo seguir confiando en el Campeón del Mundo.